lunes, 20 de marzo de 2006

Hoy mi alma se animó

Si caminas por la calle...Si miras las caras de los seres que transitan apurados por el microcentro... si prestas atención a los conductores de los vehículos... si lees muchos posts de fotologs... si escuchas la vida y obra de otras personas...

Te das cuenta, de golpe, que tu vida es una más. Una más en un mar de gente, en un planeta con incontables -incontables carajo!! ¬¬- habitantes.

Y los problemas se minimizan, y tus actos parecen más insignificantes.

....Me paro en una estrella, y miro desde allí. Y veo este país, con una forma particular. Y en esa provincia que parece salirse del resto del país, hay una minúscula ciudad. Y me adentro aún más, y veo tantos techos, tanta gente. Mucho verde, eso sí, varias plazoletas, varios árboles. Varias personas además que no tienen techo, mucho humo a cierta hora, mucho ruido al mediodía. Y entre todo esa actuación, formando parte de manera muy pequeña, me veo a mí.

Pero no como me veo en el espejo a la mañana. O cuando siento que no puedo más, cuando busco soluciones a cosas que ni siquiera las precisan... No me veo por mi nombre y mis defectos.

Me veo como otro ser más. Con cuerpo y careta para relacionarse. Con una función y varias responsabilidades, mal que mal, impuestas por la vida que me toca -que reconozco, es hermosa =)-. Con un futuro que me llegará, que también tendré que elegir...

Y creo, ahora, ¡últimamente!, en la idea de ser un alma dentro de un cuerpo. Porque no quiero, simplemente, creer que lo que soy, pienso y siento, se esfumará el día que mi corazón no aguante más y se detenga, el día que mi cuerpo ya no funcione y decida parar su actividad... el día que muera. Soy un alma acá, intentando vivir. ¡Que más da! Vos también, el que lee; el que no, el que camina, el que ríe o llora... cualquiera.

Un "ser" dentro de una persona. O no-ser... una cosa etérea, intocable, impalpable... Más allá de lo imaginable.

Pensando así, ya se relajan mis hombros, donde siempre siento presión.

Y ya no duele por dentro.
Ya no cansa el monitor.
Ya no tengo tarea mañana.
Ya no tengo que elegir una carrera.
Ya no pelee con nadie nunca.
Ya la abuela no es molestia.
Ya los hermanos se aman.
Ya basta de peleas.
Ya no hay más nada malo.
Ya detengo la búsqueda.
Ya no hay ruidos molestos.
Ya basta de frivolidad.
Ya basta de quejas de mi parte!!
Ya basta de tantas palabras que me sobran.
Ya basta de lo que me haga desequilibrarme.
Ya basta de buscar equilibrio.
Ya de pronto sonrío.

Y tengo ganas de llorar por no poder decir esto a quien de verdad quiero decírselo, a quien hubiese comprendido y dicho algo más, o quizá no, o no sé.

Y mi alma nuevamente se achica, y se esconde más adentro, en un rincón de este cuerpo.
Ella lamenta todo el dolor que pudo haber causado alguna vez. Nunca tuvo mala intención, jamás hubo maldad en su esencia.
Ella solo quiere pasar de nivel. De una forma armoniosa y favorable para todo su ambiente. Pero siente la necesidad de esa compañía.
Le falta el complemento, le falta el respaldo que le haga sentir feliz de ser como es.

Y ya no sobran palabras, ahora faltan.
El alma se sumerge en una melodía aprendida, vieja, ambigua.
No quiere mostrarse, otra vez se escondió. Deja su perfume en el ambiente, flota su esencia de cierta manera... Y vuelve todo a la normalidad.

No se vuelve a hablar de estrellas y complementos hasta la próxima vez.

*Y la búsqueda, sin querer, vuelve a empezar*