miércoles, 9 de enero de 2008

¿A dónde iría, con esas alas inútiles?


Y yo que me entristezco, como la boba siempre, ante cosas que no me incumben y que NO puedo cambiar y menos menos, solucionar.


Hoy...Solo me hace falta un sucio punkrock, y todo a la mierdddaaa

Elegir.

Pero no es la encrucijada, de estar entre tal o tal opción.
Es tener un inmenso abanico de opciones. Muchas, variadas, incluso pueden ser completamente opuestas.
Y tener la completa libertad para elegir, sin presion alguna, sin cadenas ni límites.
Y tenes todo el apoyo y la comprensión si se presenta un buen argumento, si elegis con alma-cuerpo y corazon y lo sabes defender...(como debe ser ).

Y todo eso lo torna más y más difícil, porque ...

Porque nadie nos enseña cómo saber elegir, y lo que más miedo me da es decepcionar. Equivocarme.

Que esté mal, que no sea lo esperado. Errar, errar es humano y yo soy tan humana.

lunes, 7 de enero de 2008

Mis amigos

Tengo bastantes amigos, pero tengo un grupo en especial.El grupo...mi grupo de amigos, desde hace años. Y eso es muchísimo tiempo a mi edad.

Cada uno con su historia y su particular manera de ser, es terriblemente variada la composición de este grupo. Y no es un grupo selectivo que elige a sus integrantes, sino que con un tácito criterio, inconciente, de simpatía y de confianza, las personas se acercan o alejan. No olvidamos y no dejamos de extrañar; y no quedamos estancados en algo que con el correr del tiempo queda convertido en una mentira...

La vida nos unió, y nosotros decidimos en gran medida seguir juntos....Ella nos cambia y nos moldea, y resistimos como podemos para no olvidar nuestra esencia, la personal, la íntima y la más noble en cada uno...

Si hiciéramos un inventario con los que todavía están...Que están, ahí...Que estamos.
Y nos tenemos, unos a otros, otros a unos....
-tenemos un loco que disfruta perderse en el monte, que hace música, que hace poesía, que hace y deshace chistes...
-tenemos una loca que lee libros para divorciadas y que maltrata su pelo con tinturas, que escribe y sufre y ríe y delira...y delira...
-tenemos una muchacha que parece no dejar de sonreír, que se enoja en broma y que habla en serio, que está ahí para uno y exige que estemos para nosotros mismos...
-tenemos uno que se fue lejos de nosotros y volvió, y nos brinda su humor absurdo mezclado con tintes de seriedad adulta, que nos fuma la vida y nos hace pasear por la ciudad...
-tenemos una paciente y alegre chica que soporta cualquier charla, cualquier problema ajeno; que alucina con guitarras distorsionadas y con ese escritor gay que ya nadie lee, que escribe y escribe...

y estoy yo por ahí, metida también, con mi voluble ánimo, con mis ganas de reincorporar a gente que se fue y parece no querer volver...

Yo, buscando algo que cuando lo encuentre sabré que es... lo busco en mis palabras, lo busco en mis pinturas, lo busco en cada nota melódica y en cada nudo nuevo y en cada libro o párrafo...
Y todavía no aparece, o quiza apareció y lo pasé por alto...

A veces me reprendo. ¿No será que ya tengo lo que quiero, lo que debería buscar y que ya está ahí para mí?¿Y pierdo tiempo abrigando esta tonta esperanza de encontrar algo más para mí?
Ellos ya están para mí, ya son parte muy mía, muy de adentro mío.
Y esta armonía de ser naturales sin miedo y de que no haya actores bajo un guión, sino simplemente ser lo que somos...Cada uno, a su manera
El grupo es una garantía de amor, un abrazo disponible siempre...También, una promesa de futuro agradable, de un futuro como un sueño ingenuo...
"Cuando seamos grandes..."
La razón más divertida para imaginar ese futuro temible, de adulto constituido, de hijos y trabajo, es pensar en los reencuentros lejanos, en las anécdotas que ahora estamos inventando y viviendo.

Pero no es vivir para crear recuerdos. Es vivir para malgastar sonrisas ahora, que somos jóvenes y nos tenemos los unos a los otros...Vivir y estar. Juntos.

Y son como manos que se tienden hacia mí...entre el agua, llamándome.
La paz no está en un lugar innalcanzable, la paz está con ellos, la paz que a veces no encuentro en mí y en el mundo, está entre nosotros como una silenciosa e invisible unión que baila, que va y viene y siempre está...entre nosotros...


Y poseo tanta certeza de que siempre estará esa unión, por más que no sea en el recuerdo, como una condena para nuestra soledad y tristeza.

sábado, 5 de enero de 2008

...despierta en mí el viento que todo empuja

Increíble como tres tipos con guitarra-bajo-batería, y un par más en vientos, son capaces de hacer música tan potente como la que hace La Renga. Y en cada letra, un super metamensaje que es poesía y moraleja, y la letra en sí es como un cuadro surrealista hecho con palabras...Te perdés en esos confusos sonidos y te ves atrapado por las metáforas originales que usa.

Yo no sé nada de música, lo que sé es que estos locos me llegan y me explotan la cabeza cuando los escucho. Alucino con rasgar una guitarra y que saque esos sonidos que sabe sacar Chizzo, o aunque sea ser capaz de imitar esa voz de león...
Y claro, ilusiones inmensas, pero me encanta imaginar que yo también puedo hacer eso, incitar el llanto de la guitarra y demostrar mis senitmientos a través de los rugidos, dando más énfasis a la canción.

Hermoso.
Dejo esta letra que espero poder dedicársela alguna vez a alguien.


El viento que todo empuja


Hoy me detuve en tu mirada que raja el velo del dolor
y supe que hay algo más que percibir
en este mundo que todo lo muele y desgarra.

Perdido por perdido ya ves da lo mismo vivo o muerto
pero tu alma es otra cosa, tu alma es la que te mueve
tu alma es mi razón, tu alma es la fuerza.

El águila muerte siempre vuelve y afina su aguda vista
hoy cualquiera puede morir sin saber como fue vivir
yo sólo espero sin dormirme en mis sueños
estar tan lejos de esta ignorancia.

Y es que sólo eso, sólo eso
despierta en mí el viento que todo empuja
sólo eso, sólo eso
que más puedo esperar, sólo eso.

Y mi mirada puede ver por la rejilla de tus ojos
para espiar tu corazón que se quedó con un pedazo de mi vida
al tiempo que yo brote de tu sangre.

Hoy que no hay tiempo que perder
que todo anda a reloj
que se destruye sin razón
y la vida muere en un discurso
y alguien se encarga de encerrarte
y otro prepara el fin del mundo
y tan lejana queda la esencia
que sólo el hecho de encontrarte para mí
le da sentido a mi vida.

Y es que sólo eso...



Me llené de nueva energía con sólo escucharla.
Como para no desprenderse nunca más de los auriculares, y no volver a caminar por otros caminos que no sean los inventados en estos ambientes virtuales.

Y la vida sigue...

viernes, 4 de enero de 2008

Callar al maestro.

Llega un día, un día en que discutiendo te das cuenta que argumentas mejor que esos que siempre te ganaron en las peleas y que siempre parecieron tener LA razón. Te das cuenta que cambiaste, que esos grandes seres que parecían tan perfectos, tan correctos, tan invencibles, son simples personas, defectuosas como cualquier otra, que su tamaño y autoridad no son tanto y sus razones ni son tan poderosas ni pueden dañarte por dentro, como antes parecía. Ese día creces, el canon que tenías establecido parece desmoronarse y todo se vuelve a estructurar.
Y no porque haya empezado a ser más sabia, más inteligente, o acercarme siquiera a la perfección que antes les atribuía a esos monstruos manipuladores de la palabra, progenitores de mi persona; sino que, desde mi oxidada adolescencia, empiezo a ver las cosas de otra manera. No todo es tan blanco, ni tan negro, ni tan virtual ni tan real, ni matemático ni relativo. Y si actúo de cierta forma es porque tengo algo que me impulsa. Y esas razones que me mueven no me deben avergonzar ni debo temer las burlas que pueda suscitar al expresarlas.
Ponerle el pecho a las balas, le dicen. Y balas de palabras, balas de ira, balas sin rumbo pero con fuerza, balas hechas del humo de su enojo...balas que no dañan a quien mantiene calmo el corazón y no se altera por necedades.
Hoy discutí adultamente. No lloré, como acostumbro cada vez que me lastiman cómo sólo ellos saben hacerlo. No los insulté, como hacen ellos cuando el rumbo empieza a volverse tortuoso. No grité mucho ni muy fuerte para hacerlos callar, no me fui por las ramas en medio de inútiles divagaciones para confundir-nos...
Por fin, luego de años y años de discutir y pelear (para seguir al día siguiente mejor que antes) me siento orgullosa de mí, porque pude defender y dejarlos en silencio. El silencio suele demostrar que ya no hay nada que decir, que el otro dijo lo último que sería necesario decir. Lo que viene después son balbuceos, por más fuerte que suene, por más bronca que contenga. En una tonta discusión se llega al punto ese en que, como si fuese una operación matemática, se llega a un resultado. Ese resultado no es absoluto, es la visión y la razón del que supo defenderse o supo atacar o supo exponer tu posición. Y justificarla, y defenderla.

La guerra, hecha con vidas ajenas, es una pavada cuando se compara a esto de jugarse la propia persona entera contra personas amadas.

Las discusiones en carácter de pelea no son recomendables, pero a veces resultan inevitables e incluso útiles. Déjenlas ser. Pueden resultar dañinas si son mal encaradas, pueden lastimar antes de tiempo a las personas que no sepan defenderse o interpretar las emociones del otro. Pero son mejores antes que la incomunicación y el silencio culpable de atragantarse las molestias por no querer enfrentar el problema. Además, las heridas que se producen pueden cicatrizar, y volver más fuerte la capa sensible de nuestra alma. Me refiero a endurecerse sin perder la ternura. Fortalecer la sensibilidad para no malgastarla con tonterías, siendo así mas receptivos con las cosas buenas y más tolerantes con las agresiones.



Empecé este año de linda manera, una manera más positiva que resulta nueva para mí. Ya aprendí, tantos años de escribirme y leerme me sirvieron para entender que, si bien no hay que negar los sentimientos, y la tristeza es uno de ellos; tampoco hay que sobre dramatizar todo ... Amores, amigos, peleas, llantos e ilusiones...todo se acomoda según se lo permitamos, según lo queramos e intentemos...
Y en estos pocos días del nuevo año, recibí una increíble propuesta. En realidad, la culminación de un pedido que hice hace ya unos meses, hijo de una vaga ilusión mía que no tenía la fuerza suficiente para hacerse notar antes. Me contacté con una revista de esta zona, de mi querida Misiones, y quizá empiece a colaborar con ella, mandando textos. Ya probé el gusto dulce de escribir y de ser leída, y que comenten qué les gustó, qué no, qué los tocó...Y no por monitor, sino en papel. Ver mis palabras en papel, verlas ir de mano en mano, mis ideas, mi tiempo, mi trabajo compartido con el resto. Sensación hermosa, sólo depende de mí concretarla. Pequeña responsabilidad.


Me queda mucho por hacer, y por suerte estoy aprendiendo a simplemente disfrutar del camino. Ya no es tan importante la meta como lo es el camino.
Tengo a mi favor esta inmensa libertad, estas nuevas ganas. Este año que empieza conmigo contenta, conmigo orgullosa de mí y contenta de haber podido derrotar a los maestros, aunque sea esta sola vez. Y conmigo a favor muchas cositas que parecen florecer dentro mío.
Y no habrá una tormenta, que no sea interna, que pueda lastimarlas.